
Yangón no deja de ser una gran ciudad del sudeste asiático (tráfico caótico, aglomeración de gente everywhere…), y si disponemos de poco tiempo en Myanmar, no sería un lugar al que dedicarle más de dos días. Aún así, y si eres de los que quiere quedarse más tiempo, tiene su encanto y muchas cosas que ofrecer. En mi caso estuve en dos ocasiones. Al ser mi punto de entrada y salida del país tuve que invertir un total de 3 días. Así qué, antes de comenzar a explicarte que hacer en Yangón, vamos a explicarte un brevísimo resumen de su historia.
Fue fundada a principios del siglo XI como Dragón. Más tarde, durante la guerra anglo-birmana en la década de 1850, los británicos se apoderaron de ella y la nombraron Rangún. Nombre con el que fue conocido hasta 1989 cuando asumió el nombre de Yangón. Fue la capital de Myanmar hasta 2006, cuando el gobierno militar traslado la capital a Naypyidaw.
Que hacer en Yangón
El centro de Yangón
Aunque como hemos dicho no es la capital de Myanmar, actúa como si lo fuera. Caminar por las calles del centro es un verdadero caos. Probablemente estamos ante una de las ciudades con más tránsito de gente, motos y vehículos en general de todo el Sudeste Asiático (con perdón de Ho Chi Minh, claro está).
Sin embargo, si rascas, ¡tiene su encanto!. Yangón está llena de edificios coloniales antiguos, teashops, ruidosos mercados callejeros y puestos de comida a la vera de la calle. Lo mejor para descubrir la ciudad es perderse por sus calles y avenidas.
En la zona centro de Yangón, encontraréis además del Parlamento; el Monumento a la Independencia y su gran pagoda central, la Sule Pagoda.
Pagoda Shwedagon
Situada en lo alto de la colina Singuttara la pagoda Shwedagon es la principal atracción que ver en Yangon. Un icono de la ciudad, con una gran pagoda dorada que verás desde lejos. Tiene unos 2500 años de antigüedad, (construida antes de la muerte de Buda), convirtiéndola en una de las pagodas más antiguas del mundo.
El conjunto es espectacular y gigante con 46 hectáreas, una estupa de 110 metros y con cientos de templos, pagodas y santuarios. La pagoda está recubierta con 27 toneladas de oro y la parte superior de la estupa está decorada con una corona formada por 2.317 rubíes y 4.531 diamantes. Los suelos de todo el complejo de la pagoda Shwedagon son de mármol. Además, contiene algunas reliquias de Buda, entre ellas un trozo de tela y 8 cabellos de Siddharta Gautama.
Todo el oro de la pagoda Shwedagon ha sido donado por los birmanos. Según la historia, la tradición se inició en el siglo XV cuando la reina Shinsawbu donó su peso en oro para recubrir la estupa, desde entonces el pueblo birmano dona las joyas para la conservación de la pagoda Shwedagon y la construcción y conservación de otras pagodas.
El templo siempre esta concurrido por monjes y locales siguiendo el ritual de bañar a los Budas o llevando ofrendas.
La entrada es de 8000 kyats y suele estar abierta de 04:00 a 22:00. Para llegar allí se puede ir en el bus 204 o taxi.
¡Recuerda! Aquí las oraciones y las visitas a las pagodas se hacen haciendo vueltas en sentido contrario a las aguas del reloj.
Pagoda Maha Wizaya
Enfrente de la pagoda Shwedagon, está la pagoda Maha Wizaya. Es más pequeña, pero su entrada es gratuita y vale la pena su decoración interior. Fue construida en 1980 para conmemorar la unificación del Budismo Theravada en Myanmar.
Pagoda Sule
Una de las pagodas más famosas de Yangon. Se encuentra en una rotonda, justo en pleno centro y de la caótica ciudad. La Pagoda Sule es de gran importancia para los birmanos y por ello suele haber muchos devotos con ofrendas. Se trata de una pagoda incluso más antigua que la Shwedagon, con más de 2.600 años de antigüedad.
Se encuentra en un lugar estratégico por lo que estoy segura que pasaréis a menudo por allí, ya sea porque os alojáis cerca, o la veréis al visitar Chinatown o el barrio colonial.
Pasaros por la noche, ¡iluminada se ve preciosa!
Chinatown
El barrio más animado de Yangon. Al oeste de la Sule Pagoda, con muchos alojamientos, muchos puestos callejeros para comer y muchísima gente. Además, las calles están dedicadas cada una a una profesión: locales de reparación, joyerías, papelerías, ópticas... Siempre hay ambiente, tanto de día como de noche, ya que algunos días por la noche ponen mercadillos y puestos callejeros junto al río.
Barrio Colonial
Paseando por sus calles nos vamos cruzando con la arquitectura anglo-hindú-victoriana del siglo XIX que queda en la ciudad. El barrio se encuentra al este de la Sule Pagoda, donde se encuentra el Parque Maha Bandula y el monumento a la Independencia.
Un lugar para pasear o para sentarse a contemplar el día a día de los birmanos y quizás entablar conversación con alguno de ellos.
Al norte del parque encontramos el Ayuntamiento de Yangón, y al este el Palacio de Justicia, con sus ladrillos rojos. Al norte del Palacio podemos ver la Iglesia Bautista Immanuel. Si vamos en dirección al Puerto, encontraremos edificios o embajadas como: el Edificio Postal, el Edificio Portuario o Strand Hotel.
Pagoda Botahtaung
Junto al río encontramos otra de las pagodas más antiguas de Myanmar, construida hace mas de 2500 años durante la dinastía Mon y destruida en un bombardeo durante la II Guerra Mundial. Fue reconstruida en 1948 y es un lugar de peregrinación importante para los birmanos.
No es muy popular entre los turistas. Quizás porque está un poco alejada, pero yo llegué dando un paseo. La entrada son 6.000 Kyats.
Chakhtatgyi Buddha Temple
En el norte de la ciudad encontramos el enorme Buda reclinado de 66 metros de largo. Para que os hagáis una idea sus pies miden 10 metros y sus labios más de 3 metros (ni la Veneno tenía algo así!)
En la planta de los pies hay 108 dibujos con las características de Buda, y en su costado las 55 posturas de Buda. Entrada gratuita.
Parque de Kandawgyi
Si tenéis buen tiempo el parque de Kandawgyi es un buen lugar para desconectar del caos de la ciudad. Pasear por el parque e ir recorriendo el lago artificial a través de sus puentes de madera o ir encontrando templos, jardines de flores de loto o nenúfares; o el famoso Karaweik Palace. El día que fui estaba lloviendo y la verdad es que no descubrí todos sus rincones, aún así estoy segura que merece la pena un paseo al atardecer.
Tren Circular
Una de las excursiones que más os recomiendo es el tren circular de Yangón. Un total de 3 horas en un tren de madera de más de 100 años. Durante el viaje podrás contemplar la ciudad desde otro punto de vista y el día a día de los locales. A lo largo del trayecto nos encontraremos con vendedores ambulantes, hombres mascando tabaco en hoja de areca, lo que les obliga a escupir por la ventana continuamente. Gente cruzando las vías, mercados en medio de las vías del tren, niños jugando… pero sobretodo, muchas sonrisas. Al salir del centro de Yangón podrás ver el contraste de una ciudad, a la vida en medio del campo.
El tren se puede coger en Yangon Central Railway Station y tiene un precio de 200 kyats (12 céntimos de euro!).
Donde Dormir
Después de 4 meses viajando con Ignasi, empezaba mi aventura en solitario, por lo que cambie las habitaciones dobles por habitaciones compartidas. A mi llegada a Yangón, me quedé en Dengba Hostel, en el centro, justo al lado de Sule Pagoda. Se trata de una de la mejor zona para alojarse en Yangón, céntrica y animada, a poca distancia de buenos restaurantes, el embarcadero y las atracciones cercanas al río, y fácil acceso a las paradas de autobús y taxis.
A primera vista puede parecer un edificio medio abandonado y que tal vez hace 20 años no recibe una escoba, pero al llegar al 4 piso, todo cambia y encuentras un lugar muy agradable. Hay un espacio común donde tomar el desayuno (la gran mayoría de alojamientos incluyen el desayuno), trabajar o socializar un poco. También ponen a la disposición de los huéspedes un dispensador de agua potable.
Las instalaciones son básicas pero limpias y cómodas, además de contar con un personal muy amable y siempre dispuesto a ayudarte. Excelente ubicación cerca de la pagoda de Sule, a poca distancia de buenos restaurantes, el embarcadero y las atracciones a lo largo del río, fácil acceso a diferentes paradas de autobús y taxis. El espacio público era grande y cómodo para socializar, se proporcionaba buen ambiente, hervidor ecléctico y agua mineral para beber, suministro suficiente de desayuno, wifi relativamente rápido, habitación y ropa de cama limpias y cómodas, taquillas estándar, suficientes baños y duchas.
Donde comer
Yangón ofrece la mejor oferta de restaurantes del país. El centro está repleto de puestos de comida callejera donde comer barato, además de restaurantes birmanos, chinos e indios.
Justo al largo de Mahabandoola Garden, y durante todo el día, encontraremos una hilera de vendedores ambulante, no os perdáis la Samusa thoke, una autentica delicia. Tampoco os podéis perder el Bein Moun y Moun Pyar Thalet, (un tipo de tortitas birmanas que puede ser dulce o salada.
Ingyin Nwe South Indian Food Center
En Anawrahta Rd, hay muchos restaurantes indios y a buen precio donde comer, y entre ellos cabe destacar este pequeño local de comida del sud de la India y birmana.
Mercado nocturno
Todos los días al caer el sol, en un tramo de 19th St (entre Mahabandoola Rd y Anawaratha Rd) la calle se llena de puesto de comida callejera donde disfrutar de una buena parillada o algún plato birmano desde 5.000MMK.